Líderes del mundo se unen al lanzamiento del Instituto Humanitas360 en México

“Hemos dado inicio a la creación de una nueva América Latina”. El instituto Humanitas360 fue inaugurado con un evento previo a la edición latinoamericana del  Foro Mundial Económico que tuvo lugar en la Rivera Maya, México. Humanitas360, con sede en los Estados Unidos, tiene como misión fortalecer la ciudadanía a fin de forjar un nuevo pacto social entre las personas y sus gobiernos dentro del continente latinoamericano. Esta iniciativa pretende construir una región vibrante, activa y más interconectada para las futuras generaciones a través de ciudadanos que se involucren en la mejora de las instituciones públicas de sus países. Humanitas360 busca formar sociedades más seguras y gobiernos más transparentes que sean capaces de desarrollar políticas públicas centradas en las necesidades de los ciudadanos.

El evento contó con la participación de 50 invitados, entre los cuales había líderes mundiales, profesores, profesionales de los medios, activistas y otros especialistas. Enrique Acevedo, presentador de Fusión y Univisión, moderó el debate. Entre los oradores destacados se encontraban Luis Alberto Moreno, presidente del Banco Interamericano de Desarrollo, Oscar Naranjo Trujillo, uno de los líderes del proceso de pacificación de Colombia, el profesor Ricardo Hausmann, director del Centro de Desarrollo Internacional de la Escuela de Gobierno J.F. Kennedy de la Universidad de Harvard, y los activistas tecnológicos y ciudadanos Eduardo Salcedo de Vortex y Jorge Soto de Citivox.

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Palabras de apertura de Patrícia Villela Marino, presidente del Instituto Humanitas360, en el lanzamiento de la organización el 6 de mayo de 2015 que tuvo lugar en la Rivera Maya, México.

“Formando a un nuevo ciudadano latinoamericano”

“Las irregularidades están en todas partes: a nuestro alrededor y entre nosotros en América Latina. Los ciudadanos han perdido la esperanza de un verdadero cambio. Están desilusionados por las políticas ineficaces, las políticas incomprensibles y carentes de visión, las instituciones que no responden y los gobiernos débiles. Los ciudadanos son la esencia de las democracias, y la ciudadanía consiste en la participación democrática que canaliza las frustraciones y quejas legítimas. Queremos empoderar a los ciudadanos para  devolverles la ciudadanía completa, capaz de desafiar y cambiar nuestra realidad. Queremos restaurar la esperanza escuchando y empoderando a las generaciones jóvenes, los líderes y ciudadanos del futuro. Ellos tienen la responsabilidad de cambiar a la próxima generación.

Hay dos instituciones que guían a los adolescentes de nuestra región por el camino hacia la adultez: la universidad y la cárcel.

A lo largo de mi vida hasta hace cinco años, y con más intensidad en los últimos tres años, cuando mis amigos y yo iniciamos el PLPD (Plataforma Latinoamericana sobre Política de Drogas), he visto que los adolescentes eran dirigidos de manera más sistemática a la prisión (situación de encarcelamiento) que a la universidad. Unos terminaban encerrados y a otros se les daba una segunda oportunidad según el color de piel, clase social, situación financiera y antecedentes.

Eduardo, nacido y criado en una violenta favela de San Pablo, con un padre que pagó su deuda con la justicia y la sociedad, tuvo la fortaleza y el coraje de perseguir su sueño de ser periodista. Eduardo infunde esperanza a miles de adolescentes a diario.

El juez Jayme Garcia creó SEMEAR, un programa innovador de justicia restaurativa, apoyado de forma conjunta por la sociedad civil y las instituciones. El juez Jayme infunde esperanza en el sistema judicial penal y en la sociedad.

UPDATE es una iniciativa de jóvenes activistas que busca estimular la participación ciudadana para hacer que los procesos políticos se vuelvan a acercar a las personas, y asegurar así la transparencia y la responsabilidad de las instituciones. Ellos infunden esperanza entre los más jóvenes.

“Ilegal” es la poderosa, apasionada y desesperada lucha de las madres brasileñas para hacer que la marihuana medicinal, actualmente ilegal en Brasil, se legalice en  beneficio del don más preciado que la vida puede darles: una criatura necesitada. La regulación de la marihuana medicinal se ha suavizado, y la sociedad brasileña ha aceptado hablar abiertamente sobre lo que antes era tabú. Esas madres infunden esperanza en el poder de los ciudadanos para cambiar las leyes.

Tenemos esperanza en ellos, y confiamos en que prevalecerán. La esperanza es importante. Sin embargo, no sólo queremos infundir y propagar la esperanza. Mediante el empoderamiento de nuestros hermanos latinoamericanos, queremos formar ciudadanos renovados capaces de analizar la importancia del hoy para las generaciones del mañana abordando los problemas urgentes que enfrenta nuestra región. Tenemos fe en todos los visionarios jueces Jayme, en todos los soñadores como Eduardo, en todos los apasionados Tarsos y Rafaeles que están por ahí. Los interconectamos y necesitamos de su apoyo para lograrlo.

¿Acaso los latinoamericanos queremos seguir siendo las víctimas de nuestro tiempo, o queremos que nos conozcan como los protagonistas de los cambios bien planificados que debemos impulsar?

Durante demasiado tiempo, los expertos y los gobiernos han tratado equivocadamente de mitigar la pobreza con riqueza. No ha dado resultado. ¡Miren a su alrededor!

La inclusión social y empresarial de los pobres debe abordarse con justicia, un buen gobierno y el empoderamiento ciudadano.

Al estar aquí y seguir con la tarea del empoderamiento ciudadano con Humanitas360, ¡podemos involucrarnos de forma colectiva para abordar el problema de  una manera tal que las futuras generaciones recuerden estos años como los que cambiaron el juego!

Amigos, tenemos grandes instituciones, fundaciones bien establecidas, iniciativas innovadoras y perturbadoras que deben conocerse entre sí y, por ende, conectarse e involucrarse para crear sinergias y hacer ruido, para fomentar la esperanza y promover el conocimiento que permita empoderar a los latinoamericanos que no se encuentran en esta sala  pero que son nuestra gente y deben ser nuestros ciudadanos, ¡nuestra responsabilidad!

Gracias.”