El trabajo se desarrolló inicialmente a partir de una asociación con H360 y el MIT; conozca los desarrollos y planes futuros de la plataforma tecnológica cívica
Ganadora del Premio Tecnologías Sociales 2021 de la Fundação Banco do Brasil, la aplicación móvil Monitorando a Cidade es el resultado de una larga trayectoria de colaboración entre instituciones brasileñas y extranjeras. Entre 2014 y 2015, el Instituto Humanitas360 fue uno de los inversores del proyecto, apoyando la importación de la plataforma de software desarrollada originalmente en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) y el intercambio de experiencias con investigadores brasileños. El primer uso práctico de la plataforma en Brasil fue el seguimiento de la calidad de las comidas escolares en el estado de Pará, que fue realizado por los propios alumnos de las escuelas públicas. La experiencia se extendió después a varios estados. Con el software desarrollado por el MIT que permite adaptarse a las demandas de los ciudadanos, el trabajo creció y empezó a utilizarse también para controlar la calidad del agua y otros datos medioambientales. Hablamos con la profesora Gisele Craveiro, de la Universidad de São Paulo, y el investigador Manoel dos Santos, dos de los creadores de la versión brasileña de Monitoring the City, para recordar la historia del proyecto y conocer el estado actual del programa, con la reanudación de las actividades presenciales tras dos años de pandemia. Lea el chat a continuación.
¿Puede hablarnos un poco del inicio del proyecto Monitoring the City en Brasil, con la recogida de datos sobre las comidas escolares en Pará?
El inicio de Monitoring the City se remonta a 2014, cuando la herramienta se estaba creando para ser un apoyo en el seguimiento del plan de objetivos y, por ello, se bautizó como «Promise Tracker» o, en traducción literal, algo así como el seguimiento de las promesas de campaña. Su difusión en el territorio nacional se realizó entre 2015 y 2016 entre las organizaciones de la sociedad civil brasileña relacionadas principalmente con la Red Social Brasileña por Ciudades Justas, Democráticas y Sostenibles. En Pará, los actores de la sociedad civil, la academia y los organismos de control ya estaban realizando acciones conjuntas de rendición de cuentas y vieron el potencial de utilizar la herramienta para la recolección de datos en colaboración. ¡Así es como la campaña de recogida «Mare da Merenda, João! El Observatorio Social de Belém, la profesora Lidiane y los estudiantes de Contabilidad de la Universidad Federal de Pará (UFPA), la oficina regional de la Contraloría General de la Unión en Pará, el Movimiento Estudiantil Pacto por la Educación en Santarém. En esta etapa, se estableció una asociación entre los creadores de la plataforma tecnológica del Centro de Medios Cívicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), el Instituto Humanitas360 (H360) y el Colaboratorio de Desarrollo y Participación de la Universidad de São Paulo (USP) para documentar estos casos de uso de la plataforma y también los procesos de escucha para la mejora de los elementos de la interfaz tecnológica, la metodología y la discusión de los aprendizajes mutuos a partir de los procesos que tuvieron lugar en las escuelas públicas de tres ciudades de Pará. Esta fase, que pretendía registrar lo aprendido para orientar las decisiones sobre el proyecto, contó con la colaboración financiera y estratégica de H360, que permitió realizar una investigación e implicarse en las visitas al territorio y en los actos de intercambio entre los participantes activos en las campañas. El uso de Monitoring the City en Pará resultó fructífero y varias otras iniciativas de gran alcance se derivaron o se inspiraron en las descritas anteriormente.
¿Cómo ha evolucionado Monitorando desde ese primer momento? ¿Qué otros casos destacaría entre los proyectos?
Una de las grandes virtudes de la plataforma Monitoring the City es que es lo suficientemente flexible como para ser adoptada para diversos contextos, problemas y para apoyar la recogida de diversos tipos de datos en el territorio. Los casos de las campañas de monitoreo de comidas en Pará y también el Proyecto Estudiantes de Actitud de la Contraloría General del Distrito Federal, que monitoreó diversos elementos de la infraestructura escolar, mostraron hasta qué punto las organizaciones que trabajan con el control social pueden apoyarse en una herramienta que permite la recolección a gran escala por la propia comunidad o por los beneficiarios de una política pública. Por ello, los creadores y participantes de las campañas de recogida de datos en colaboración merecen un gran mérito. Son estas personas las que diseñan, inspiran, comprometen y conducen los datos recogidos con Monitoring the City a la transformación social y política que pretenden. Así, entre 2016 y 2019 se llevaron a cabo varias iniciativas con Monitorando, algunas a nivel local, otras abarcando varios estados brasileños. Algunos sobre el tema de las comidas escolares, otros apoyando la recogida de datos por parte de los estudiantes del curso de Resolución de Problemas de la USP o analizando la calidad de los cursos de agua en el Proyecto de Biomonitoreo de las Aguas del Ministerio Público Federal y Embrapa.
Vídeo producido por H360 en 2017
¿Cómo actúa el proyecto en el desarrollo del sentido de la ciudadanía?
La plataforma tecnológica cívica Monitorando a Cidade es una herramienta que promueve innovaciones democráticas a través del proceso de participación ciudadana con mediación tecnológica para el seguimiento participativo de las políticas y servicios públicos en interacción con los órganos de inspección y control externo. Así, el uso de la tecnología deja de ser un fin en sí mismo en favor de la constitución de procesos participativos, colaborativos y coproductivos a través de la conexión entre los ciudadanos, el Estado y los actores de la sociedad civil. Las actividades de los órganos de vigilancia y control en los servicios sociales representan un avance y una innovación en la gestión pública, traduciéndose en un proceso de modernización del Estado y actuando como medio de lucha contra las prácticas corruptas, el clientelismo y el fisiologismo en los órganos de gobierno. El monitoreo participativo es «un método de producción de conocimiento sobre un plan específico que, al mismo tiempo, involucra a un grupo de personas, sin que la información producida o las personas sean necesariamente de la academia» (como destaca Marisa Villi en su tesis de maestría). Este mecanismo es necesario para fomentar el ejercicio de la ciudadanía activa, porque a través del seguimiento participativo de las políticas públicas, los ciudadanos pueden influir en la democratización de la toma de decisiones colectivas. Así, se entiende que las iniciativas de monitoreo participativo con la mediación tecnológica de la plataforma Monitoreando la Ciudad permite la ampliación y empoderamiento de la participación ciudadana para el ejercicio de la ciudadanía digital, posibilita la construcción de un modelo de gobernanza participativa empoderada y la incidencia de los ciudadanos en la toma de decisiones gubernamentales. El uso de las tecnologías cívicas para el trabajo en red es importante en el proceso de rendición de cuentas, permitiendo la producción y articulación de colaboradores y participantes en la producción masiva de datos e información en diferentes bases, permitiendo el análisis, la retroalimentación y el impacto en la cultura política, en las condiciones organizativas para el diseño, implementación y evaluación de las políticas públicas.
¿Cuál ha sido el impacto de la pandemia en Monitoring the City? ¿Cuáles son los próximos planes para el proyecto?
En primer lugar, es importante señalar que antes de la pandemia de Covid-19 se realizaron varias campañas de monitoreo participativo de comidas escolares, en el período 2016 y 2019, con el uso de la plataforma tecnológica cívica Monitoreo de la Ciudad por parte de las comunidades escolares en iniciativas con interacción entre instancias de rendición de cuentas socio-estatales y sociales, en formato presencial. Trabajamos con la Contraloría Regional de Pará (CGU-PA), junto con la Facultad de Ciencias Contables de la Universidad Federal de Pará (FAICON- UFPA) y el Observatorio Social de Belém (OSB Belém) en Belém, Pará, en 2016 y 2017, abarcando 15 escuelas. Además, con la Contraloría General del Distrito Federal (CG-DF), contando 104 escuelas públicas involucradas en la campaña de monitoreo participativo, entre 2016 y 2019. También hubo el caso de la Contraloría General del Estado de Bahía (CGU-Bahía), entre 2018 y 2019, que involucró tres iniciativas de campaña de monitoreo participativo de las comidas escolares en las escuelas del estado de Bahía. En la primera fase, se llevó a cabo un proyecto piloto en 11 escuelas de Salvador. Y en la segunda etapa, la iniciativa se amplió a 21 escuelas entre Lauro de Freitas y Jequié. Por último, se cita el caso de la Contraloría General del Estado de Goiás (CGE-GO), en 2019, que abarca 105 escuelas. La expectativa del órgano de control externo era ampliar a 246 municipios y atender a 300 escuelas públicas de Goiás. Sin embargo, la pandemia de Covid-19, causada por el nuevo coronavirus, provocó el cierre de escuelas en un contexto global y nacional, contingentando así la planificación estratégica de la Contraloría General del Estado de Goiás (CGE-GO), impidiendo la realización de las campañas de monitoreo participativo de las comidas escolares con mediación tecnológica durante el año 2020.
En el momento actual, es necesario realizar nuevos estudios para verificar las formas en que se trató el control en la pandemia y el uso de lo digital en este contexto. En 2021, la CGE-GO retomó la iniciativa de promoción de la participación ciudadana en el monitoreo participativo con mediación tecnológica a través de la auditoría cívica en asociación con la Secretaría de Estado de Educación de Goiás. Los próximos pasos de Monitoring the City en esta post-pandemia son estructurar un Núcleo Ejecutivo para ampliar su ámbito de actuación, sistematizar el aprendizaje del uso de la plataforma para comunicar sus acciones a las comunidades de práctica; establecer nuevas asociaciones institucionales para asegurar su sostenibilidad económica y financiera; reanudar las relaciones con socios históricos como la Contraloría General de la Unión (CGU), las Contralorías Estatales, el Ministerio Público Federal y las Organizaciones de la Sociedad Civil para rediseñar y mejorar su desempeño en el proceso de expansión de su trabajo en las escuelas y otros contextos, fomentando el apoyo mutuo entre los partidarios, desarrolladores y/o ejecutores de las campañas; y también desarrollar y utilizar la investigación aplicada para mejorar el Monitoring the City con el objetivo de fomentar el empoderamiento democrático de los ciudadanos y de la sociedad, con vistas a la consecución del interés público; participar en los espacios que conforman el ecosistema de los organismos de inspección y control externo para difundir la plataforma tecnológica cívica Monitoring the City; e implementar una estructura de servicios para el desarrollo de procesos metodológicos, campañas de seguimiento participativo, talleres de formación y atención al ciudadano y al usuario.
Sobre el investigador
Manoel dos Santos es licenciado en Pedagogía – FACE Valença-BA, y en Literatura Vernácula por la Universidad Estatal de Santa Cruz – UESC. Actualmente estudia el doctorado en Cambio Social y Participación Política en la Universidad de São Paulo – EACH/USP.
Sobre el profesor
Gisele da Silva Craveiro es licenciada en Informática por la Universidad Federal de Mato Grosso do Sul (1995). Es doctora en Ingeniería Eléctrica por la Universidad de São Paulo (2003) y tiene un máster en Informática por la Universidad Estatal de Campinas (1998). Actualmente es profesora en la Universidad de São Paulo, donde dirige el grupo de investigación Colaboratório de Desenvolvimento e Participação (Colab-USP) y está vinculada al Programa de Postgrado en Cambio Social y Participación Política (PROMUSPP).